jueves, 27 de octubre de 2011

PAGANINI

Yo, como Goethe, he imaginado mil veces los meteoros volando sobre las manos de Paganini. Como el poeta Heine he visto abrirse la tierra ante la profundidad de unas notas acribilladas en cascadas de luz. 27 de octubre. Ese día de 1782 el mundo alumbró uno de los personajes mas enigmáticos que jamás hayan existido.
Si me remonto a Génova oigo "la campanella" ,si cierro los ojos observo esa figura alta y desgarbada, pero elegante y electrizante acariciar una y otra vez las cuerdas de su Guarnerius. No quiero hacer una glosa de su biografía. Quiero hacer comprender a los que amen el violín  - y a los que nunca se han acercado a él-que su genio conquistó al infinito nuevos terrenos para la existencia humana. No ya sólo porque impulsó una técnica violinística que hasta ese momento no existía y por lo tanto hizo dar un salto a la humanidad sino también porque gracias a ese impulso se beneficiaron  mas cosas relacionadas con el arte y con  otras esferas de la vida.
 No es tiempo de creer en supersticiones ni en pactos con el diablo. Su técnica violinística fue tan apabullante que a las gentes y a algún tipo de prensa de la época sólo les quedó el recurso de lo diabólico para explicar su maestría. Quien se haya acercado alguna vez a un violín comprenderá que, cualidades físicas al margen, si uno no trabaja hasta la saciedad es imposible dominar ese instrumento y el diablo no suele aparecer.
 Como todo genio  Paganini fue sometido al escarnio, a la burla, y a la difamacion. Su vida, probablemente, tampoco fue la de un ciudadano normal. Fue acusado de todo tipo de barbaridades, algunas con mas fundamentos que otras.  Preso de su alma romántica - se decía que había encerrado el cadáver de su amada en el sepulcro sonoro de su violín- llegó incluso a ser un músico moderno, en el sentido de hoy, dado que se hizo rico, creó modas - en Viena hasta los spaguettis eran a "la paganini"- y despertó admiración allá donde  hizo cantar a su "cannone", nombre de su violin preferido.
El misterioso personaje no dejó mas que un discípulo que nunca llegó a su altura y jamás desmenuzó los secretos de su arte, en parte porque murió antes de lo previsto y en parte por puro misterio. Viendo sus conciertos y sus caprichos para violin uno puede intuir las dificultades y los retos que suponen para cualquier violinista afrontar esas partituras. Después de él ha habido excelentes violinistas. Muchos que han tocado sus conciertos y sus caprichos pero..¿superaron a Paganini?
Opiniones hay para todos los gustos. Yo creo que no. Paganini tenía algo mas que técnica. Era un alma romántica, un individuo que abría nuevos caminos, que despejaba incógnitas de su físico y de su inteligencia, que se acercaba a ese mundo inmaterial, fugaz y esplendoroso que es el sonido como un fantasma alado mas cerca de la ensoñación que de la realidad. Paganini acuño sus famosos secretos que nunca se transmitieron a nadie. Tal vez otra leyenda. Tal vez no. Creo que si tuvo secretos, conquistas de regiones y de espacios espirituales dificiles de expresar para quien no vuele en las lianas de las notas, en la perfección de una nota dada por tu cuerpo, por tu mano deshaciendo el jeroglífico de la existencia y transportándote allá donde todo es etéreo y enérgico. Una fuente de vida.
La Iglesia le negó el entierro en tierra consagrada. Se le hizo un proceso por brujería, -tal vez el último que acometió la santa Sede antes de entrar en el siglo XX, - que duró décadas. Hoy sus restos reposan ya en Italia y sus manos, una copia de sus manos, se pueden ver en su museo de Génova.
Yo sólo creo en Paganini. Salud y misterio.

1 comentario:

  1. Después de leer el comentario dan ganas de escuchar al genial músico con premura, aunque también es verdad, que como en todo lo demás hay que tener formación musical -en este caso y cuanto antes se empiece mejor- para satisfacer nuestros sentidos/gustar, para deleitar nuestro ánimo/agradar, entre más motivos -pues a todas partes de nuestro organismo beneficia la música...
    Respecto a si ha sido superado por otros, es muy común cuestionarse eso -en casi todas las disciplinas sucede- es como si estuvieran compitiendo unos con otros a ver quien es mejor/gana y deberíamos acostumbrarnos a plantearlo de otra manera pues esa no es eficaz y genera malestar, los genios y los no genios lo que tenemos que apreciar/valorar son las peculiaridades, las innovaciones las contribuciones... Cada genio aporta su manera de abrir nuevos caminos/cambios/mejoras a veces radicales a veces no tanto - enlazan con lo anterior, el tema da para mucho... En este sentido parece que Paganini es un ejemplo claro en música, como tan fantásticamente/maravillosamente nos cuenta el autor de este ilustrativo/emotivo/bello y didáctico comentario. Da la impresión que la música para el es fundamental en su vida o más que eso y desde luego dan ganas de salir corriendo y escuchar a este genio del violín. No hay que olvidar que ser una autoridad en algo no significa que su vida sea un un ejemplo a seguir ni sea lo que le aporta esa genialidad más bien es lo contrario es a pesar de eso: Su genialidad va más allá de eso, salta montes y fronteras... como nos dice en su Canto Espiritual S.Juan de la Cruz.

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